Cómo practicar la meditación caminando

meditar caminando

¿Te has puesto a pensar cuanto tiempo pasamos caminando en nuestra vida?

¿Cuántos kilómetros habremos recorrido a lo largo de nuestra existencia?

¿Será posible calcular esos valores?

Ahora bien, la verdadera pregunta aquí en realidad es cuántos de esos kilómetros o tiempo que hemos gastado caminando, lo hemos hecho con consciencia, disfrutando la experiencia de caminar.

Seguramente la respuesta será un rotundo “casi nada”.

Generalmente cuando caminamos, nuestra mente está en cualquier lugar menos en el momento presente, y desperdiciamos así una excelente oportunidad de usar ese momento para nuestro beneficio.

Nuestra mente tan agitada, inquieta e insatisfecha tiende a lanzarse de una cosa a otra, como lo haría un mono que salta de una rama a otra sin detenerse.

Nuestros pensamientos encuentran millones de caminos, y estos a la larga, nos llevan al mundo del olvido.

Si tan solo lográramos transformar nuestros caminos en una senda para la meditación, nuestros pies darían cada paso con consciencia.

Beneficios de meditar caminando

Meditar al caminar es una parte importante de la meditación budista, y una forma de realizar meditación en acción.

En este tipo de meditación el objetivo es utilizar la experiencia de caminar mientras nos concentramos.

Entre los principales beneficios que obtenemos al meditar mientras caminamos podemos mencionar:

  1. Desarrollamos piernas fuertes, y aprendemos a caminar largas distancias.
  2. Incrementamos nuestra capacidad de concentración, ya que aprendemos a adquirir consciencia de cada uno de nuestros movimientos.
  3. Logramos un equilibrio entre meditar sentado y caminando.
  4. Meditar caminando ayuda a nuestro sistema digestivo.

¿Cómo meditar caminando?

La meditación caminando la podemos practicar siempre que tengamos que andar o ir a algún lugar.

Algo muy importante es que debemos procurar que esta práctica sea de calidad, por lo que debemos darle el tiempo que sea necesario.

Y es que meditar caminando se parece mucho al acto de comer. Con cada paso que damos, estamos alimentando nuestra mente y espíritu. Por tanto, si caminamos con pesar y ansiedad, es como si estuviéramos consumiendo comida basura.

Para meditar caminando toma en cuenta los siguientes consejos:

  1. Elige un lugar apropiado. El lugar que elijas debe permitirte estar calmado y tranquilo. Evita lugares donde debes detenerte constantemente, o que implique hacer muchos esfuerzos.
  1. Postura correcta. Antes de que empieces a caminar, deberás poner ambos pies en paralelo y separar tus piernas aproximadamente el ancho de tus hombros. Deberás tratar de mantener una buena postura de tu columna, alineando tus orejas con tus hombros.
  1. Evita enfocarte en algo. Al caminar meditando lo mejor es evitar enfocarse en ningún propósito en específico. Lo ideal es aprender a disfrutar del simple hecho de caminar.
  1. Olvida tus preocupaciones. Deja atrás tus preocupaciones y ansiedades mientras caminas. Cuando entras en esta dinámica de caminar de manera consciente, no hay espacio para ningún otro pensamiento que no sea el de estar atento a tu momento presente.
  1. Sonríe. Cuando Buda practicaba la meditación caminando, siempre llevaba una sonrisa en su rostro. Y es que cuando sonríes mientras caminas meditando, logras experimentar una sensación de paz, serenidad y bienestar completa.
  1. Respira a consciencia. Esta es una de las prácticas más importantes que debes realizar mientras meditas caminando. Respirar a consciencia significa que estas presente en cada inhalación y en cada exhalación. Debes prestar atención a tu respiración mientras estas caminando.
  1. Camina despacio. Aunque puedes caminar a cualquier velocidad, lo más recomendable es que lo hagas con lentitud y dando pequeños pasos. Elige aquel ritmo en el que te sientas cómodo.
  1. Usa una gatha. La gatha se trata de un verso corto que utilizas con el fin de centrar tu atención mientras meditas, y lo recitas en silencio. Esto es muy útil sobre todo si te cuesta concentrarte y tu mente divaga con facilidad. Un ejemplo podría ser:

Mientras inhalas puedes decir: “En el aquí”.

Mientras exhalas puedes decir: “En el ahora”.

Caminar en plena consciencia nos trae alegría, paz y tranquilidad, y si aprendes a meditar mientras lo haces, mejoraras tanto tu salud física como mental.

Al inicio puede ser que sea difícil, sin embargo, te invitamos a que des el primer paso aprendiendo a meditar. Aprende a meditar descargando GRATIS este material.

También te puede interesar: Prueba algo nuevo durante 30 días

Dale “Me Gusta” para unirte a nuestra comunidad en facebook

como-aprender-a-meditar.fw_-1024x335